Resurgir

Después de estar dormido, el tigre ha despertado y está hambriento.
Ansioso de correr. Ansioso de cazar. Siempre está al acecho, alerta.
El bramido de la tempestad es su rugido, que cala hasta los huesos.
Su mirada penetrante es de fuego...
El tigre que dormía ha despertado, ha roto su prisión.
Ahora corre libre, se desliza por la oscuridad.
Escuchan un rumor, sienten su presencia y ya es muy tarde...
El tigre viene a reclamar lo que siempre ha sido suyo.
Creían haberlo domado, pensaban que su sueño sería eterno.
Pero ahora los espera. Ya nada será igual.
Este tigre ha crecido y su voluntad junto con él.